martes, 1 de julio de 2014

Analfabetismo y rezago educativo


Luis Alberto Romero

Hace un año y medio, el rector de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), José Narro Robles, y el investigador David Moctezuma Navarro presentaron un ensayo que fue difundido por el Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI), y que se refiere a la dimensión del problema del analfabetismo en nuestro país.

En el trabajo “Analfabetismo en México, una deuda social”, se reconoce el rezago que en ese sentido enfrentan, sobre todo, adultos mayores, mujeres e indígenas. Se sostiene, además, que las estrategias y acciones emprendidas por el gobierno no han sido exitosas hasta el momento.

Los autores sostienen que “El analfabetismo constituye una de las grandes deudas que tiene la sociedad con quienes lo padecen. Limita el crecimiento de las personas y afecta su entorno familiar, restringe el acceso a los beneficios del desarrollo y obstaculiza el goce de otros derechos humanos…”; de igual manera, advierten que de no enfrentarse esta situación, será cada vez más difícil revertir el problema de la desigualdad.

Los números nos dicen que nuestro país tiene más de cinco millones de analfabetas. En 1950, con una población de más de 25 millones de habitantes, México tenía el 42 por ciento de personas en el analfabetismo; esto es, 6 millones 400 mil. Para 1970 tenía el país 48 millones de habitantes, de los cuales casi 7 millones no sabían leer ni escribir, el 25.8 por ciento.

En el 2000, 97 millones de mexicanos fueron contados por el inegi; de ellos, casi 6 millones eran analfabetas, el 9.5 por ciento. Diez años después, en 2010, había 112 millones de personas y de ellas, 5 millones 300 mil no saben leer ni escribir, el 6.9 por ciento.

En México, el grado de escolaridad promedio es de 9.1, que equivale a poco más de la secundaria terminada. De cada 100 personas mayores de 15 años, 4.8 no tienen un solo año de estudios, y apenas el 55.5 cuentan con educación básica. En Veracruz, hay 2.2 millones de personas con la educación básica incompleta y el promedio de escolaridad es de 7.7; es decir, menos del segundo grado de secundaria. De cada cien veracruzanos mayores de 15 años, 10.6 por ciento no tienen ni un solo grado de escolaridad, y sólo el 57.9 por ciento tiene la educación básica terminada.

El censo de 2010 reporta que con el 11.4 por ciento de su población analfabeta, Veracruz es la cuarta entidad con más altos índices en el país. En esa lista se encuentra a la cabeza Chiapas, con el 17.8 por ciento; Guerrero, con el 16.7; Oaxaca, con el 16.3; y el estado de Puebla completa la lista de los primeros cinco, con 10.4 por ciento, siendo la media nacional de 6.9. En contraparte, los estados con menor población analfabeta son Distrito Federal, Nuevo León, Baja California Norte, Coahuila y Sonora.
De ahí la trascendencia del anuncio realizado ayer en Veracruz por el secretario de educación pública, Emilio Chuayfett Chemor, quien señaló que en agosto arranca la estrategia nacional contra el analfabetismo y el rezago educativo; el objetivo es que en los próximos 4 años, 2.2 millones de mexicanos aprendan a leer y escribir, que una cantidad similar concluya la primaria y que más de 3 millones terminen la secundaria. De tener éxito en dicho programa, México habrá dado un paso importante para saldar esa deuda social con su población vulnerable. @luisromero85, http://luisromero85.blogspot.mx/

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